Cuando duele más quedarse que irse
Amor, he dejado de fumar porque para matarme ya tengo otros vicios, tu
sonrisa por ejemplo. No queda rastro ya de todos los mensajes que me escribías,
he acabado con todo empezando por mi. Mis ojos dicen que te echan de menos, que
echan de menos verte llegar con la sonrisa puesta, con tus ganas siempre de
contarme que tal la semana (aunque nos hayamos tirado toda la semana hablando). Mis oídos echan de menos escuchar un "te he echado de menos pequeña"
o un "cada día estás más guapa".
Hace un tiempo me preguntaron que
era lo que más me gustaba de ti, y les dije que lo que más me gustaba de ti era no
conocerte nunca del todo, tener algo siempre que me sorprendiera. Que me
jodieses los esquemas cuando mejor me sentía o que vinieras y me besaras cuando
ya lo daba todo por perdido. Hace unos meses también me preguntaron que tenías
tú para que yo te quisiera y no quisiera a otros, y les contesté que tenías
magia y eso muy pocas personas pueden conseguirlo, hay personas que tienen
magia y no les hace falta ser brujos.
Amor, te he dejado por escrito todos los sentimientos, para que puedas
leerlos siempre que te apetezca y tengas un ratito para acordarte de mi, de
cuando me hacías rabiar o de cuando venías con ganas de comerme a besos. He
aprendido que el dolor es inevitable pero el sufrimiento es opcional, y yo
decido no sufrir, ya ha venido la realidad y me ha dado las hostias
correspondientes, ya puedo ser feliz lejos y tranquila.
Amor no puedo pedirte que vuelvas, tengo el insomnio por las
nubes y la cabeza en todas partes menos en la tuya. Hoy me has dado las buenas
noches aunque en nada se pueden comparar a cuando me las hacías. Putos golpes
de estado sentimental, quien cojones diría de inventarlos. Cuando te fuiste no pensé que no volverías,
ni siquiera pensé que tuvieses el valor de marcharte, que ilusa fui. Te he
vuelto a escribir una carta, deberías leerla. debería enviártela, deberías leer que bien quedan las
palabras escritas desde el dolor, deberías leer que bien quedan las palabras
cuando es a ti a quien van dirigidas.
Amor, no puedo pedirte que vuelvas, ni siquiera sé si seré capaz de
volver a mirarte a los ojos aunque por dentro me esté por muriendo por ellos,
no puedo pedirte que vuelvas porque esta vez ni siquiera sé si seré capaz de
quedarme yo.
Dios mio.
ResponderEliminarNo sé como lo has hecho, pero casi se me saltan las lágrimas.
Tus palabras guardan muchos sentimientos, los cuales compartimos muchas personas.
No sé como has hecho que sea tan jodidamente perfecto, y tan jodidamente doloroso.
Este texto me acaba de dar en toda la frente. Me van a estar pitando un mes los oídos. Y eso no me suele pasar a menudo.
ResponderEliminarHola! Me has dejado sin palabras... Simplemente cada palabra que has escrito encaja perfectamente, y le hace sentir a uno lo que tu sientes.
ResponderEliminar"Cuando duele mas quedarse que irse", hay tanta verdad en eso.
Besos.
Pau.
Cuando duele qué poco cuesta escribir y hacerlo así de bien como tú lo haces!
ResponderEliminarHay que irse cuando quedarse significa pasarlo mal.
Besicos.
Vaya M :/ ya vemos tus sentimientos y tus sentires, te daré un abrazo fuerte con todo mi cariño :(
ResponderEliminarNo puedes pedirlo, y cuánto darías por que volviese, con las súplicas encerradas entre esas líneas. Los peores vicios son esos, engancharse con el pasado y que el alma se vaya rompiendo un poquito más cada día.
ResponderEliminarBesitos, valiente.
Miss Carrousel